Hoy hace 25 años que España sufrió uno de sus episodios más grotescos, pero importante, de su historia reciente: el intento de golpe de estado del 23-F.
Tejero cantando 40 en bastos
Todos sabemos lo que ocurrió entonces: Tejero en el Congreso con 200 guardias civiles, Milans del Bosch sacando sus juquetitos a pasear por Valencia, Gutiérrez Mellado echándole un par de huevos al encararse al bigotes… Pero a mà me gustarÃa que habláramos de nuestra experiencia: ¿cómo vivimos nosotros (muchos desde nuestra tierna infancia) esas interminables 18 horas? Os animo a que en los comentarios contéis vuestra experiencia. Aquà va la mÃa:
Yo tenÃa tan sólo 8 años y pico y mis recuerdos van asociados a la alegrÃa de no ir al dÃa siguiente al colegio y tirarme el dÃa entero viendo la tele
Yo a esa edad no era consciente de la importancia polÃtica que tenÃa (o las catastróficas consecuencias que podÃa haber tenido) lo que estaba sucediendo. No tenÃa miedo por tanto.
Mis recuerdos casi se limitan a que aquella tarde de lunes, interrumpieron la programación normal de la televisión para emitir montones de dibujos animados. Dejaron de emitir los programas previstos para sólo emitir, muy de cuando en cuando, algún boletÃn informativo. Y entremedias, para rellenar, ponÃan dibujos. Eso siguió incluso bien entrada la noche por lo que yo estaba encantado.
A la mañana siguiente mi madre me dijo que no fuera al colegio, que me quedará allÃ. Lejos de preocuparme esa decisión, me alegró enormemente pues podÃa tirarme toda la mañana viendo dibujos. Además, ya no solo emitÃan dibujos, sino también pelÃculas de Danny Kaye (que me gustaban mucho) asà que disfruté de lo lindo.
No recuerdo si mis padres o hermanos estaban asustados o no, yo sólo recuerdo lo que disfruté sin ir al cole y viendo dibujos y pelÃculas. Hay que entender que por aquel entonces no existÃa ni la televisión de madrugada ni la matinal. Desde las doce de la noche a las dos de la tarde del dÃa siguiente no habÃa más que carta de ajuste. Y ese dÃa la televisión no dejó de emitir dibujos y pelÃculas durante todo ese tiempo ¡Qué novedad! Yo no me despegaba del televisor. Cuando habÃa un boletÃn, gritaba: «¡Mamá, noticias!» y unos minutos después seguÃa viendo la pelÃcula de turno.
Sà recuerdo, cuando acabó todo a mediodÃa del dÃa 24, una sensación de frustración y tristeza porque se me habÃa acabado lo bueno… Yo, con mis inocentes 8 años, hubiera deseado que se prolongara más el asunto, sólo por seguir viendo pelis y dibujos.
yo era un niño de 4 años de edad la verdad que de ese dia mi recuerdo es nulo pero en mi familia fueron momento muy muy intenso, por mi parte poco mas